El Pentagrama mágico

El Pentagrama en el esoterismo, la Magia y la história

El Pentagrama en la Magia es también conocido como Pentalpha o Pentangle y tiene la forma de una estrella de cinco puntas dibujada con cinco trazos rectos. El origen de la misma lo encontramos en la palabra griega «pentagrammon» un sustantivo de «pentagrammos» o «pentegrammos», una palabra que significa aproximadamente «cinco-alineados» o «cinco líneas».

El Pentagrama se utilizó simbólicamente ya en la antigua Grecia y Babilonia, de hecho esta figura fue muy importante dentro de la sociedad pitagórica permaneciendo a lo largo de los años hasta nuestros días en los que lo encontramos como un símbolo de la fe de muchos Wiccanos o como símbolo de la cinco heridas de Jesús en movimientos Cristianos, entre otros.

Esta capacidad de perdurabilidad a través de los años tiene toda su raíz y su fuerza en el hecho de que el símbolo del Pentagrama tiene asociaciones mágicas las cuales suelen hacer referencia a la armonía de la cosas, cuando los cuatro elementos y en si todo lo terrenal, tienen un dominio puro y espiritual que las dirige y no andan sin rumbo ni gobierno.

Pero nuestro símbolo fue también asociado durante mucho tiempo al planeta y a la diosa Venus así como a su culto, así la palabra romana «Lucifer», fue en sus inicios un término usado para hacer referencia a Venus en su manifestación de «Estrella de la Mañana», la portadora de la luz y el conocimiento.

Sin embargo el origen más probable del Pentagrama lo encontramos en las observaciones de los astrónomos prehistóricos porque las sucesivas conjunciones inferiores de la parcela de Venus vista desde la tierra conforman un Pentagrama de forma casi perfecta en todo el zodiaco cada ocho años.

El símbolo del pentagrama en el ocultismo Europea

Enrique Cornelio Agripa de Nettesheim y otros perpetuaron la popularidad del Pentagrama como símbolo de la magia. A mediados del siglo diecinueve una nueva distinción surgió entre los ocultistas que se desarrollo en torno a la orientación del Pentagrama: cuando este tenia una única punta hacia arriba representaba al espíritu y la conexión con la divinidad presidiendo sobre los cuatro elementos y la materia, siendo esencialmente «bueno», mientras que si este estaba escrito con dos puntas hacia arriba y una hacia abajo, hacia alusión al mal, porque simbolizada la desconexión de lo divino en nosotros mismo y la sumisión total al gobierno de nuestros instintos, teniendo siempre una incapacidad de liderazgo interior debida a la dualidad existente entre nuestra menta y sentimientos expresada en su parte superior que nunca nos permite tener un camino verdaderamente firme y único en la vida. Por tanto, mantengamos siempre la figura de la estrella de cinco puntas en posición vertical, con la parte superior del triángulo apuntando al cielo, porque es la sede de la sabiduría.

El pentagrama en el Cristianismo

Los cristianos medievales creían que el Pentagrama simbolizaba las cinco llagas de Cristo y que protegía contra las brujas y demonios, sin embargo esto paso debido, probablemente, a la mala interpretación de este símbolo que, usado por algunos magos ceremoniales, llevo a que se asociara con el mal siendo posteriormente rechazado en algún momento en el siglo XX.

El Pentagrama y el Neopaganismo

Muchos Neopaganos, especialmente Wiccanos, utilizan el Pentagrama como un símbolo de fe. Sin embargo este no es un símbolo universal para el Neopaganismo y rara vez es utilizado por Reconstruccionistas. Su simbolismo representa a los cuatro elementos presididos por el Espíritu que se sitúa en su punto más alto, lo cual es símbolo de la armonía natural de las cosas y es por ello que también es usado en la aclamación de espíritus elementales de los cuatro puntos cardinales en el inicio de un ritual. Cuando a veces el símbolo del Pentagrama es rodeado por un círculo hace referencia a la vinculación armónica entre estos elementos y su equilibrio.

El uso mágico del Pentagrama:

Tal y como hemos podido ver en el desarrollo de este artículo el Pentagrama hace clara alusión a un hecho que es de vital importancia en el aprendizaje de cualquier rama del Ocultismo, Esoterismo y Misticismo:
El gobierno de nuestros impulsos e instintos por nuestra parte divina y espiritual
Aprender y desarrollar este hecho es la base de toda disciplina que promueva el crecimiento espiritual y el desarrollo del potencial interno inherente en todos los seres humanos. En consecuencia, llevar un Pentagrama es una invocación a nuestra capacidad de auto control, a nuestra capacidad de rechazar todo lo negativo, a nuestra capacidad de producir bien, a nuestra capacidad de manifestar sabiduría, a nuestra capacidad de ser fuertes, etc. Por tanto, el Pentagrama es un símbolo indicado para llevar a diario así como en todos los rituales que realicemos pues tiene la capacidad de orientarnos hacía nuestro verdadera voluntad interior llevándonos a conectar con esa corriente generadora de toda vida que nos guiará en nuestras operaciones y acciones y nos liberará de todo mal.